sábado, 22 de diciembre de 2012

¡PUM!


Las razones por las cuales uno sufre por "AMOR" se desprenden de una contradicción humana: es porque el ser humano, llegada una edad, es maduro para coger, pero no para convivir, ni para pensar, en general, no es maduro para (sobre)vivir y relacionarse de manera sana, en el contexto de una sociedad capitalista y (post)moderna.

Por eso, la gente se arma con preconceptos del orto, y pone etiquetas: quién es puta y quién no, quién es poronga y quién no. Sin saberlo, eligen pareja viendo quién es más apto para la reproducción, y algun@s, aún concientes de ello, lo ponen en práctica, busquen una relación o no. Basan su existencia en quién es virgen, en quién se la come, en quién la tiene más grande. Inescrupulos@s, basan su accionar y emiten juicios de valor, basándose en pelotudeces estilo: con cuántos se acostó este, cuántos novios tuvo aquella...etc. Todas las charlas más banales encierran valores universales, que asumimos como naturales, y en realidad, es todo un aparato cultural. Todo es una construcción humana. Yo no veo que los bichos de Animal Planet se peleen porque se culearon, tuvieron hijos y ahora no se quieren.

Ergo, el problema es cultural, y la batalla se define entre las necesidades espirituales del hombre y el ímpetu más superficial, efímero y vacío de contenido de ponerla (para lo cual, se dejan afuera las necesidades materiales, a fines de no complicarla, simplemente). Mejor dicho, para no hablar de batallas ni de violencia, el punto escencial es que cada persona transite un camino introspectivo para saber en qué punto de maduración se encuentra, y mire a su alrededor para saber con quién se quiere relacionar.

¿Es acaso tan dificil? ¡Pues sí! Pero vale la pena intentarlo.














NOTA: Este ensayo fue un flash de una charla con una amiga, y no pretende ser más que esta breve acumulación de ideas. Prefiero dejar el espacio para que la reflexión y crítica la haga el lector. Esto es un material pobre, muy elemental, muy básico de lo que quisiera construir, pero es una punta de una nueva de ver qué es esto que me parece que es el amor. Estaría bueno ver qué venía pensando, que cada quien lo revise. Pero esto tenía que ser hecho en frío y lo más bruscamente. De allí el título.



miércoles, 19 de diciembre de 2012

¿De qué lado estás? Parte I


La nueva vida de laburar y ser músico, que me torna absolutamente bipolar por razones ya expuestas, me está dejando poco tiempo para mis opiniones. Ya saben a quién le hecho la culpa: al laburo por alienante, claro está. Es un call center....qué le voy a hacer. Una salvedad: es para atención al cliente. Aprovecho para contar que ya le saqué la ficha a cada personaje, los cuales merecen una nota. En particular, siempre hay uno que es el súper agresivo, súper irónico, súper telemarketer, que viene de una campaña que vende algo súper basura, y que tiene una actitud frente a la vida súper tóxica...

Sepan entender mi hispanización de la palabra "super" como "súper". Grave que no termina ni en "N", ni en "S", ni en vocal. Indiscutible. No me rompan. Los yankis no son mejores que nosotros. Si no les gusta, ármense un blog y escriban una nota sobre cuán boludos somos los que le ponemos tilde a SÚPER...

Todo para rellenar...

Mi tesis de hoy, lo copio tal cual me salió manifestarlo en el caralibro:

Noto que cada vez con mayor frecuencia alguien Anti-K o Ultra-K mete la política en comentarios cada vez menos relacionados. Uno que sueña con un mundo mejor, y no con la dominación absoluta de un partido, o de un "anti partido", lo ve como una inmadurez. Debo estar equivocado, sea por no estar en ningún bando, o sea por soñar...

Más que un debate político, lo que pongo en relieve es la actitud desubicada de una persona, sea cual fuere su inclinación (mejor dicho, ante quien fuere su inclinación, su genuflexión), al mezclar la política con cada vez más tópicos. Hay oportunidades que permiten hacerlo por vías del ingenio, y siempre son bienvenidas para mí las críticas al poder. Lo feo es estar hablando de cosas bonitas o de cosas que nos gustan y que me vengan a romper las pelotas con cuestiones del poder.

Puntualmente, hablaba de regalos de navidad y de música con una amiga, y un tilingo empieza a insultar a Cristina. No sé qué habrá dicho por cadena nacional esta vez, pero esta persona decía que para ella no existe Papa Noel. Asumo que se refería a la tendencia del gobierno nacional a combatir las corporaciones, que son las que crean el frenesí de consumo navideño (por eso con las mineras y fumigadoras no se mete, claro). Estuve averiguando, porque dado que a mí me interesan las noticias que marquen el devenir del país, no tenía idea. No son lo mío las declaraciones estrafalarias...Resulta que criticó la figura de Papá Noel, alegando que es "transplantado de otra cultura". ¿Acaso no lo es? Eso sí, ya lo sabíamos, no lo descubrió Cristina, entonces, ¿Van a ser tan obtusos de negarlo? Si sos Ultra K, sabelo, y si sos Anti K, y querés seguir mamanto un mito corporativo, allá vos. La verdad que los tipitos de Coca Cola en las peatonales tocando las canciones navideñas, más allá de la propuesta musical en sí, me dan ganas de disparar...muchas ganas...

Esté de acuerdo con aquella persona o no, eso poco importa. Obviamente que me va a molestar si encima representa una burla a mis valores, pero aún si representa una crítica a quien me opongo resulta molesto, más molesto, puesto que no vale la pena manchar lo lindo de una charla entre iguales con la mera mención de alguien indeseable. Para qué conversamos y nos distraemos, si alguien falto de paz, acobardado por los medios de falacias y dicotomías, viene a molestar.

Y pienso que cada vez es ser peor. Pienso que hoy en día: un ciclista no va a poder practicar su deporte sin que escuche nombrar al jefe de gobierno porteño; un analista de sistemas no va a poder tocar una netbook sin que le rompan las pelotas con el plan Conectar Igualdad; con el aumento que están anunciando ahora, uno no se va a podir subir a un bondi ni esperar en la parada, y va a fumarse la hora de viaje o de regreso hablando de eso. Encima, cada vez son más "creativos". Se suman a la neurosis de la vida de ciudad la desinformación, y salen cosas en verdad curiosas. Va a llegar el día que uno esté hablando del clima, que es la primer estupidez que te vienen a hablar para romper el hielo, y alguna histérica va a decir: "Sí, porque gracias a esta yegua, llueve cada vez más, mientras usa la plata de los jubilados para regalarle paraguas a los villeros". Esa tortura cotidiana muchas veces está impulsada por la noticia tergiversada que esté de moda repetir como loro en la semana o mes. Sí, encima eso, hablar al pedo...

Odio los mensajes anti politizantes, porque son una manera de poner un telón a los problemas sociales. No se confundan. Esto es más bien un poner las cosas en su lugar. Así como dicen que no hay que poner los huevos en una misma canasta, yo agregaría: poner los huevos donde corresponde. Nadie expone ni denuncia en los espacios correspondientes. Todos esos cómicos, cuando se debate y hay que poner las cartas sobre la mesa, se nota que no son más que payasos, o simples marionetas.

Por último, cabe destacar un síntoma interesante a nivel político también. La gente vive hablando de política, discutiendo de política, peleándose por política. Está tan neurótica por su situación y está sumida en un remolino de bronca, y desde la cúpula se estimula y se hace uso y abuso de éste. El poder tiene una mecánica de separar a la gente para utilizarla como peones en sus intereses, y este es un claro ejemplo. Cada vez más gente se putea por criticar/defender "a Cristina" (sí, encima de eso, la lógica personalista), y se aleja de la búsqueda de un país ideal, que sería un debate más interesante. Pero cómo va a lograrse en medio de esta guerra de bandos ficticia. Esto no es la "lucha de clases", que es parte de la teoría marxista que avalo y adopto, pues estos debates tienen poco que ver con ello. Si fuera así, la clase oprimida tomaría conciencia de quiénes pudren la cuestión y ofrecerían una resistencia con un plan de acción. Justamente, esto es un proceso por el cual esa conciencia para sí se ve nublada por la desinformación y la ignorancia. Poco que ver con la lucha es que la gente se escupa y se insulte por ponerse una camiseta de un partido político.

 Un serio debate sobre la bipolaridad de la política se desprende de ello, pero lo quiero dejar aparte, de allí que exista una primera parte y una segunda.

Hasta acá por hoy.


lunes, 10 de diciembre de 2012

¿Y a vos qué te parece? ¡Manzana!


Desencuentros lingüísticos. Malentendidos y confusiones. Palabras cruzadas...

En estos tiempos, en que los adultos se quejan de la forma de hablar de la juventud, con mucha razón, a la vez, ellos hacen un uso del lenguaje que poco ayuda a la difícil tarea de comunicarse. No hablarán como presidiarios, pero son poco claros, y me dan las mismas ganas de partirles algo en la cabeza...Si bien mantienen o tratan de mantener las formas o una manera educada de dirigirse entre ellos, resulta poco práctica su manera de comunicarse.

Hace un tiempo, el gran filósofo Capusotto nos hablaba de los jóvenes que utilizan la palabra "manzana" como una expresión afirmativa, por demás afirmativa, reafirmativa. Muchos adultos sienten que es una falta de respeto y un desguace del idioma. Hasta hoy hay gente que piensa que el lunfardo es igual de repudiable. ¿Saben qué me parece repudiable? Que la gente no se pueda comunicar. Entre todas las muletas comunicativas nefastas que se me pueden ocurrir, no hay nada peor que las formas "anticomunicativas" que erige la gente. Yo no quiero quitarle el valor poético o inquisitivo que puede tener una ironía, pero si la gente puede pasar de estar tomando mate a odiarse para toda la vida por palabras, creo que vale la pena enderezar a los adultos que dejan de hablarse por nimiedades antes de creernos los paladines de la Real Academia Española.

Si bien los jóvenes empezaron a decir "Manzana", fue un invento de los adultos el uso irónico de casi todas las palabras, de allí la desesperante situación de que te tiren un "Manzana". Un equivalente igual de nefasto también fue una invención de la gente que se cree demasiado inteligente. Son tan inteligentes que todos vamos a preguntarles, pero como somos tan idiotas, sólo nos merecemos un "¿Y a vos qué te parece?? Imagínense, situación límite:

Yo: "Quedan 10 segundos para que estalle la bomba , y según pude deducir, debo cortar uno de estos dos cables, no estoy seguro, ¿Cuál?".

Otro: "¿Y a vos qué te parece?".

Yo: "Según lo que me enseñaste, sería el azul".

Otro: "¡Manzana!".

Yo: "Entonces, ¿Es el rojo?".

Otro (Gritando): "¡MANZANA!"...

(Estallamos)

Hoy en una entrevista laboral, mientras respondía un cuestionario, me indican: "No des por sentado o por sobreentendido lo que yo pueda llegar a leer", o algo así. Mucha razón. ¿Frase forra típica de empleador? No, no creo. No esta vez. Eso sí, en el trabajo es uno de tantos lugares que la neurosis se hace presente a la orden del día, y toda la gente se siente mejor diciendo cosas que no se supone que no querían decir, o disfrazando las cosas de lo opuesto, y demás vueltas del habla humano.

¿PARA QUÉ COMPLICAR?

En una aproximación, si tuviera que señalar algo, sin recurrir a las fuentes que estaría bueno recurrir, puedo intuír que viene de las profundidades de la mente. Paso a resumir los fundamentos del planteo que persigo.

La psicología entiende el lenguaje como la capacidad humana que conforma al pensamiento o a la cognición, participando en muchos procesos psicológicos que el hombre posee. Lenguaje y pensamiento se desarrollan paralelamente, se influyen mutuamente. En la interacción constante entre pensamiento y lenguaje, la correlación entre desarrollo lingüístico e intelectual es muy importante. La inteligencia es necesaria en el desarrollo del lenguaje ya que se presupone la capacidad de representación mental para su aparición. El lenguaje, por su parte, se enriquece con la maduración intelectual y, a su vez, es básico para el desarrollo intelectual, pues constituye un medio de adquisición y aporta precisión al pensamiento. Recordemos que el lenguaje es considerada una condición para ser considerado humano, y es lo que nos permite crear cultura.

El poder ver, señalar y nominar las cosas, interiorizarlas y aprehenderlas, es gracias al lenguaje. Todo lo que uno piensa, pasa por el lenguaje. Luego viene un serio y grueso debate sobre el mismo, si es una capacidad innata, con la que nacemos, o por el contrario, tiene un origen cultural y, por tanto, es aprendido o adquirido como tantas otras conductas inteligentes humanas. Interesante para hablar de estas formas locas que tenemos de hablar, pero honestamente, no da por ahora.

Lo que pretendo decir con todo esto es que estas formas de no comunicación tienen que tener un origen en nuestra estructura psíquica. Si preferimos decir "Manzana" a afirmar o rechazar algo, tiene que haber algo que haya arrancado el fruto de la palabra y haya puesto una manzana en su lugar.

Investigando también en materia de psicologías social, me encontré con lo que creía que era justo lo que sucedía (*): son formas de decir algo que queremos decir, que nos desgarramos las vestiduras, nos morimos por decir, pero que existen estos procesos mentales locos que nos impiden. Paso a ejemplificar:

(Antes de continuar,...¡Gracias "Rincón del vago" y otras páginas!)

IMPLÍCITOS: LA MANZANA PROHIBIDA

A ver, yo iba a poner un cuentito que explicase el asunto, pero, ¿Qué sucede? Miren:

Hay ciertas cosas que no hacen falta aclarar, porque todos tenemos ciertas ideas sobre como son ciertas cosas. Por ejemplo, todos sabemos que hay ciertas cosas que no se pueden decir. Esas cosas ponen en conflicto a ciertas ideas, ciertas instituciones, ciertas costumbres...ciertas cosas que damos por ciertas, y que no hace falta nombrar, ciertamente. Hay cierta gente que hace esas ciertas cosas, aunque no deberían. Por ciertas razones obvias, se sabe quienes son, así que, ¿Por qué no se ocupan de esas personas? Resulta que las cosas deben ser de una determinada manera, y que no hace falta decir cómo deben ser. El problemas es que no son como deberían ser, ¿Y a qué se debe? Se los diré: existen ciertas razones porque sucede, y existen ciertas cosas que no permiten que se digan, salvo bajo el nombre de "ciertas cosas"...

...¿Me explico?...


SOBREENTENDIDOS: LA MANZANA DE LA DISCORDIA

"Manuel, fotocopiá la documentación y mandámela, y esta vez,  no quiero ninguna falla".

No me queda claro, lo que sí me queda claro que si no lo hago, o si voy y le pregunto, Patricia se va a re calentar, va a tirar la bronca con su novio el jefe del área, y como estoy a prueba todavía, la empresa va a poder darse el lujo de sacarme a patadas en el culo sin tener que poner un solo peso. Así sucedió con Matías, y lo presencié en segundo día que entré a laburar acá. A ver...

Encuentro esta carpeta en mi box, que según lo que me dijo en el pasillo, debe ser la documentación. Debo mandarle esto a ella...¡No! Si está acá, es porque debería tenerlo yo, como aquella vez que le llevé lo que me pidió que "le mandara" y resulta que tenía que estar en la DGI. Bueh, eso queda claro. Tengo que mandarla...¿Original o fotocopia? Hm...me imagino que fotocopia, no va a querer quedarse sin ella...pero si es para un trámite, te piden el original. Encima, fotocopiar. Yo también, loco, soy más inútil. Nunca me dijo cómo, pero es muy obvio cómo se debe de usar una fotocopiadora. Uno de esos diez botones debe accionarla, y una de estas cuatro bandejas es donde se pone el papel, y en la pantalla, con esos numeritos y letras como de reloj de pulsera...no sí, clarísimo... 

Bah, no sé, no estoy seguro... 



IRONÍAS Y SARCASMOS: MANZANAS PODRIDAS

Entró apresurado al departamento que compartía con Valentina desde hacía ya unos nueve meses, el tiempo que le cuesta a algunas parejas concebir una convivencia neurótica. Tenía más o menos media hora para arreglar el nidito de amor, preparar una comida respetable para su exigente acompañante y arreglarse, a fin de no desatar otra tormenta de ambivalentes comentarios. Pese a su exigencia, Fabri tenía en claro muchas cosas que quedaron bien claras sobre las preferencias de Vale, pues ella siempre fue sincera:


"El mantel que nos regaló tu mamá queda maravilloso en la mesa", le decía ella, y eso que no se lleva bien con la mamá de Fabri, sabe reconocerlo; 

Valentina dice adorar "la manera de dorar la carne en el horno más de lo común", y "los ingredientes para sus ensaladas", que le parecen "por demás originales". La otra vez en el asado de su tío pidió quemadito el vacío, y se sirvió abundante ensalada, así que debe ser eso;

Y finalmente, siempre destaca que, "pese a sus 28 años sigue luciendo orgullosamente su remera de Los Redondos". Siempre que lo ve con ella, le dice lo mismo. Eso sí, nunca escuchó un disco de ellos, ni lo acompañó a ningún recital de Skay, a los que suele ir Fabricio;

...pero Fabricio supone que su novia está feliz con él, desde sus gustos y su personalidad hasta su forma de cocinar, y que es sincera con él a pesar de sus tormentas de ambivalentes comentarios.


PROPUESTA: 

¡Digamos las cosas como corresponde!...


* A mí me gusta leer, pero no para absorber conocimientos. Tengo una metodología personal que busca enriquecerme desde adentro: buscar el conocimiento por intuición e inducción de las cosas, y que la palabra escrita sea sólo una forma de darme cuenta que pude aproximarme a la verdad por mí mismo. Junto con la transmisión oral horizontal del conocimiento, la gente estaría cada vez más ungida de sabiduría.

 

jueves, 6 de diciembre de 2012

El 7D llegó (hace rato)...


Todos saltaron de sus butacas al escuchar el dictamen, o para ser más precisos, al leer en redes sociales el eco de la corte suprema. Sí, yo también, pero yo vengo pensando en escribir de esto hace unas semanas ya, por encima de los planteos políticos que se puedan hacer. Sagazmente, aprovecho que el hierro está más caliente que nunca, para darle un poco de mi forma de pensar. La libertad de expresión es un asunto para nada ajeno a alguien que se considera un libre pensador, que intercambia opiniones con gente a favor y en contra del gobierno nacional, pero que no sale a agitar ninguna bandera. Ni el Estado ni ninguna otra corporación van a tener el gusto de verme haciendo ruido para servir a sus intereses. Sólo tengo un pacto conmigo mismo, y con nadie más. Yo no me quiero “casar”. Yo sólo tengo un juicio propio de las medidas que toma el gobierno, una conciencia histórica que nos llevó al hoy y un deseo de transformar la realidad desde mi lugar, desde mi pequeño círculo de… (me estoy yendo al carajo, ¿Queda claro que no me garpa ni Clarín ni el Estado, no?...Bueno).  

   El título de este ensayo quedará claro cuando se alcance la idea principal que les traigo. El siguiente planteo tiene como objetivo final mostrar un curso de acción que uno puede tomar frente al poder de los medios en general.

ESTADO DE LA CUESTIÓN

   Para quien no esté adentrado en la actualidad ni en las cosas de la política (hace bien, dado que todo Estado moderno en el contexto de un mundo capitalista es un nido de urracas) le cuento brutalmente resumido qué onda con esto de los medios: desde hace dos años que se viene tratando de cambiar una ley de la dictadura sobre los medios de comunicación. En teoría, se plantea garantizar la libertad de expresión, haciendo que se escuchen distintas voces, brindando el espacio a distintos personajes de tener su medio de comunicación. Particularmente, me entusiasmó mucho enterarme de que los pueblos originarios, por primera vez, van a tener su espacio para transmitir su realidad de las cosas.

   Resulta que, entre otras cosas, busca desarticular un monopolio de multimedios que erigió el Grupo Clarín. Básicamente, fue servil a la dictadura y a los gobiernos neoliberales de los ’90 (y cuando le convenía servir al ascenso Néstor, también… digámoslo). Desde el punto de vista empresarial, fue reventando la competencia a nivel local y absorbiendo medios en todo el país. Aprovecho para contar que fútbol para todos, además de ser un espacio de bajada de línea oficialista, fue creado con el objetivo de que la señal de los partidos llegue a todos sin tener que tener Cablevisión, que habiéndose apropiado de un montón de medios, también logró tener la exclusividad de los doparti que movilizan a los fanáticos futboleros (*).  Acá es uno de los tantos lugares donde jugó el monopolio, así como también al poner en fila a todos los medios para tirarle bosta al gobierno.

   ¿Por qué saltó la bronca? La ley dicta que uno no puede tener más de 24 licencias bajo su regazo, y dado que Don Magneto (**) tiene como 300, interviene el poder judicial para que el Grupo Clarín devuelva la bolsa. El gobierno puso un día para que se realice eso, el dichoso “7D” (ya si no sabías esto, sos un cangrejo ermitaño) dado que Clarín había pedido un poco más de tiempo para hacer la tarea, la dichosa “medida cauterlar”, que puntualmente eximía al grupete de largar parte de su patrimonio. La cosa reventó porque se dio una prórroga, es decir, se dilató la medida cautelar, y nos pincharon la ilusión de la libertad de prensa que habíamos erigido.

CUARTO PODER

   Efectivamente, hay gente que sigue pensando como hace varias décadas: si algo está en un diario, o si se dice en el aire, ha de ser verdad, indefectiblemente. Si quiero enterarme de lo que pasa en el mundo, si quiero aprehender “la realidad”, tengo que prender la tele, escuchar la radio, comprar el diario, etc. Se ha erigido el “cuarto poder", lo cual no es nada nuevo ni nada que yo descubrí, el cual existe porque se le dio dicho poder. Al igual que el Estado descripto por un tal Thomas Hobbes en su obra “Leviathan”, el periodismo es una especie de monstruo que las mismas masas dotan de poder. Los hombres y mujeres se subordinan ahora frente a una estructura que les cuente cómo es la realidad.  Podríamos articularlo con la alegoría de la caverna de Platón, también, pero a lo que yo apunto, más que a el camino que uno trace para llegar construir una verdad, es el intermediario que existe, las instituciones que existen y que pretenden someternos. De allí que lo encaré por ese lado. Yo no estoy para nada en contra de la Ley de Medios, pero dado que la justicia tiró para el lado de los poderosos, yo ya estaba gestando en mi cabeza una propuesta (auto)superadora. Si todos miramos la pantalla, si nos alimenta y lo retroalimentamos, si nos hacemos eco de todo lo que se pone al aire, el monstruo crece, por consenso nuestro.

   Es por esta razón que no me paro del lado ni de “Periodismo para todos” ni de “678” a la hora de hablar de este tema, y para decirlo de una forma extremista. A los dos programas los veía, puesto que cada uno brindaba una perspectiva diferente de la actualidad argentina. Toda persona comprometida con la realidad tiene la obligación intelectual de “escuchar las dos campanas”. Cada vez los fui viendo menos porque se iba haciendo claro el mapa de intereses, más allá de la legitimidad y la calidad de la información. A mí me sirve mucho informarme, y respeto mucho a quienes lo hacen, pero si la información no tiene un compromiso, o mejor dicho, si lo que se hace es comprometerse con una corporación o institución, y se abandona la construcción de un panorama, ya no tiene sentido. Eso nadie que esté en la caja boba me lo va a garantizar. No por un nihilismo juvenil e infundado, no por ser “rebelde sin causa”. Es por el pacto que tengo conmigo mismo de libre pensador. Me encantó, entre otros informes, que Lanata pusiera a la luz a un hijo de puta como lo es Gildo Insfrán, o el seguimiento del caso de Boudou, o de cómo el gobierno se hizo de un caudillo como D’elia. El día que él mismo dejo en claro que era un peón de Clarín, sentí que el gordo no era de los míos, cuando toda la vida se puso la camiseta de periodista independiente, y fue de los pocos que habló de la mierda de las décadas pasadas. Me parece bien que 678 transmita las medidas que toma el gobierno para sostener el crecimiento económico, pero sigue siendo un espacio bancado con la plata de un pueblo que tiene derecho a pensar diferente. Por eso tampoco milito, porque a mí nunca me va a gustar ser peón de ningún aparato de dominación, aún si algún día estamos en el comunismo más utópico (¡Porque es un fucking aparato de dominación!)…

   El monopolio del Grupo Clarín es real, porque más allá de noticias, es quien tiene la última palabra en importación de libros, en la difusión de música, películas, en resumen, tiene el control de la cultura que te puedas llegar a servir. Asimismo, el proyecto que pretende llevar a cabo el Gobierno, como muchos dicen, es un arma de doble filo, ya que simplemente puede pasar a cambiar el dueño del monopolio…el resto, es un salto de fe que cada quien decide dar, fuere por el bando que fuere.

¿HASTA DÓNDE VALE LA PENA CALENTARSE?

   La ley de medios tuvo de positivo, además de la regulación, que trajo a la luz el debate sobre si en verdad estamos escuchando todas las voces, todas las opiniones,… ¡Es imposible! La misma crisis de representatividad que puede existir en una sociedad sobre a quién votar, la hay desde lo que piensa cada quién. Es un buen ideal, pero lo mejor de ello, es que empezamos a hacernos consientes de que todos tenemos voz y opinión, en la medida que la hagamos presente. Uno tenía automatizado el ejercicio de prender la tele o sentarse a leer soberbiamente el diario en la mesa, pensando que esa actividad edificante lo realizaba como ser inteligente. La posta es que hoy existe internet, que además de la impresionante oferta de estupideces que trae, es un canal completamente abierto. Tenés la página del diario para no tener que garpar para leer noticias, pero también tenés además incontables diarios independientes virtuales, blogs de opinión, miles de espacios autogenerados y autogestionados, ¡Y podés tenerlo vos también!

   Al calor de la gestación del dichoso 7D, muchos abrimos nuestros ojos, nuestros oídos y nuestras mentes. Hoy cada quién puede emprender un camino de buscar los medios informativos que más le interesen, que más lo llenen, que más lo representen. Si seguís mirando la tele, vas a seguir alimentando a un monstruo, pues de esto se trata el 7D: ¿Quién va a tener más agarrado al monstruo? O quién va a tener más monstruitos. Por eso me animo a decir que EL 7D LLEGÓ HACE RATO. Llegó y se está logrando la libertad de expresión gracias a que se plantea que existen otros medios para llegar y para recibir, y que cada quién está en facultades de opinar. El contenido de lo que dice, ha de someterse a otro tipo de pruebas, pero los derechos y las oportunidades están. Desde hace rato. Hoy no necesito que Clarín se venga abajo. Hoy no me interesa lo que pasan por la tele. Me basta haber tenido y continuar mis estudios sobre historia, sociología, economía y filosofía para ser yo quien interprete mi visión subjetiva de las cosas, y los medios serán una herramienta más para poder yo ver las cosas. El que no tiene esos conocimientos, toma sin digerir, sin analizar, lo que dice Clarín, porque estaba establecido que los diarios tenían la verdad de las cosas, siendo emisarios fieles que venían a contarnos cómo es el mundo más allá de las fronteras, o fuera de las paredes de nuestras casas. Esos medios seguirán siendo un aporte para mí, pero hoy puedo declararme libre de darle la bola que se me cante, y de darle bolilla a quien se me cante.

   Está en cada quién saber buscarlo. Si a un buscador web me remito, va a aparecer primero en los resultados quien más haya tranzado con cierto buscador para ello, pero hoy la información se transmite de forma horizontal y cada vez más libremente. Hoy no existís en la web sin Google, es la posta…¡No se diga más! De ahora en más, busquemos alternativas superadoras de la ley desde la conciencia en sí, que la información nos llevará a seguir desmantelando otros monopolios que siguen causando estragos.
No necesito ninguna ley. No necesito ningún control.

NOTAS
(*) Me parece bárbaro que quien quiera disfrutar del fútbol lo haga. Para mí, va a seguir siendo un espectáculo de 22 tipos detrás de una pelota, y una cortina para los malestares sociales.
(**) Léase “Mañeto”. Sí, yo también me cagué todo y pensé “¡No! El villano de X-men está metido en esta tramolla. Era de suponerse”…